La cadena rosarina llegó a la localidad de Funes con una propuesta de nivel superlativo en lo referido a equipamiento y diseño.
El amplio local de 1.500 m2 de salón de ventas, con 13 Checkouts, cuenta con la última tecnología y diseño de avanzada en un predio de 3.300 m2 totales, construidos en dos plantas y un subsuelo.
La firma Arneg acompañó a La Reina con el equipamiento completo del local, desde las exhibidoras refrigeradas, cámaras frigoríficas y central de frío, estanterías metálicas y muebles de caja, hasta el edificio realizado en paneles termoaislantes.
“Para la nueva sucursal, todos los equipos y muebles se diseñaron de acuerdo a la estética particular de la tienda”, dijo Mauro Vallone, Gerente Comercial: Mercado Exterior & Key Accounts en ARNEG.
A su vez, se puso especial atención en el ahorro energético y sustentabilidad, realizando toda la instalación frigorífica con gases naturales, propano para los autocontenidos y CO2 para el resto de los equipos.
Sustentabilidad y respeto por el medio ambiente
El desarrollo del emprendimiento estuvo a cargo del estudio Isiar Arquitectura y fue concebido teniendo en cuenta las características de la ciudad de Funes, considerada el Jardín de la Provincia de Santa Fe.
Tanto el edificio, como sus sistemas de aprovechamiento de agua, los equipos de refrigeración, y la iluminación están en línea con la sustentabilidad y el medio ambiente.
En el salón amplio, se destaca la presencia de la madera en todo el perímetro del lugar y los mobiliarios.
La iluminación a base de LED, estuvo a cargo de Iluminación Buenos Aires, tanto en el interior, como en el exterior.
Sobre techo negro, la iluminación del salón de ventas es sectorizada, lo que realza las diferentes áreas de la tienda, cada sector tiene una iluminación determinada, lo que lleva a destacar a los productos de una manera especial.
Los controladores fiscales son de Cía. Hasar y los carros fueron provistos por Garplast.